Hablando en español, el Santo Padre señaló que "en este momento, me siento cercano a los afectados por las lluvias torrenciales que, en los últimos días, han devastado gran parte de Colombia".

Benedicto XVI expresó luego su deseo que los "los llamamientos a la solidaridad sean escuchados" y manifestó su adhesión a "cuantos elevan oraciones al Señor por las víctimas y a cuantos están viviendo horas de angustia y tribulación".

En castellano el Papa saludó luego de manera particular a "los Obispos, sacerdotes, religiosas, religiosos y fieles que habéis venido de Ecuador y España, acompañando a los nuevos Cardenales" creados en el Consistorio ordinario de ayer.

"Pidamos al Espíritu Santo, por intercesión de la Madre de la Iglesia, María Santísima, que los sostenga e ilumine con su gracia para que, llenos de amor a Dios y estrechamente unidos al Sucesor de Pedro, continúen entregando fielmente su vida al servicio de Dios y de los hombres, y así poder un día participar de su Reino. Feliz domingo", concluyó.