Dice la Real Academia de la Lengua que una locomotora es una máquina que, montada sobre ruedas y movida por vapor, electricidad o motor de combustión interna, arrastra los vagones de un tren.

El Gobierno de Juan Manuel Santos pretende impulsar el país con cinco de estos aparatos para generar desarrollo. Se trata de las locomotoras de minería, vivienda, infraestructura, agro e innovación. La tarea no es sencilla, porque se busca recuperar el protagonismo del mercado interno, el fortalecimiento de las exportaciones y el mejoramiento de las condiciones sociales en el país a través del impulso al empleo y el aumento de los ingresos.

Sin embargo, dice Ramón Javier Mesa Callejas, decano de Ciencias Económicas de la Universidad de Antioquia, la posibilidad real de poner a marchar íntegramente estos trenes del crecimiento, no se ve tan claro especialmente por las dificultades con el financiamiento, en especial en vivienda y el desarrollo agrícola, dos de las cinco locomotoras que tienen un impacto significativo en el empleo. Si a esto se le suma la agudización de la revaluación del peso como resultado de la bonanza minero-energetica, difícilmente las locomotoras van a despegar.

Pero no todos piensan lo mismo. El director de Fedesarrollo, Roberto Steiner, reconoce que hay problemas de financiación, pero señala que con las reformas que cursan en el Congreso como la regla fiscal o las regalías, habrá suficiente combustible para moverlas.

Es claro que las locomotoras no están a todo vapor. De hecho, podría decirse que apenas están en su fase de despegue. El Gobierno ya les inyectó plata: 8 billones de pesos. Pero se requiere más combustible para que las máquinas muevan su engranaje con toda la fuerza.

» Cada locomotora del crecimiento le apunta a unas metas concretas

El primer case para la construcción de viviendas es de 100.000 millones de pesos

La locomotora de la Vivienda ya prendió motores con la incorporación de 100.000 millones de pesos más al Fondo de Reserva para la Estabilización de la Cartera Hipotecaria por parte del Gobierno para ampliar el cupo de créditos con subsidio a la tasa de interés.

El censo del Dane del 2005 muestra que el déficit de vivienda en el país afecta a 3,8 millones de hogares, una cifra que motivó al Ejecutivo a fijar nuevas estrategias para que el problema habitacional sea menor y a mover la economía a través de la construcción de vivienda, que es uno de los grandes generadores de empleo.

En el periodo 2005-2009 el balance del mercado muestra que en un año se alcanza una producción formal de 140.000 viviendas, pero al mismo tiempo se forman 285.000 hogares nuevos.

La meta es consteruir un millón de viviendas en 4 años.

La ministra de Ambiente y Vivienda, Beatriz Uribe Botero, dice que ésta será una de las locomotoras más fuertes por su impacto en el empleo.

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Mucho por hacer en materia de infraestructura

Los retos del país a nivel de Infraestructura son de un tamaño colosal. Dicen en la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI) que el número de kilómetros de vías de doble calzada han de multiplicarse por tres para alcanzar estándares internacionales decentes. Los túneles en las vías son urgentes.

Además, el mejoramiento de los puertos es necesario.

Y todo esto no se logra fácilmente si no se trabaja con seriedad en la definición de los proyectos, porque hay que sacarlos a concesión. Y este es el punto fundamental de la estrategia para que sea viable la consecución de los inversionistas. La creatividad financiera pero hecha con mucha responsabilidad es vital.

Para el ministro de Transporte, Germán Cardona Gutiérrez, el Gobierno está concentrado por ahora en la financiación de la terminación de los proyectos viales de la pasada administración. Hay un déficit de 800 kilómetros a los que se le están buscando los recursos.

Por su parte, la directora de la Cámara de Comercio de Medellín, Lina Vélez de Nicholls, opina que ésta es una de las locomotoras más importantes para Antioquia, para que la gran industria paisa no pierda conectividad y competitividad.

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La Innovación tiene el reto de hacer mucho con pocos recursos

Para Sergio Díaz-Granados, ministro de Comercio, Industria y Turismo, la locomotora de la Innovación es la más importante, porque es multisectorial y trabaja con un principio básico: generar mucha más riqueza con menos recursos.

Todo eso a partir de la creatividad y de la innovación. "A esto se le suma el programa de transformación productiva.

Queremos que esta sea una locomotora medible para que mes a mes sepamos cuánto empleo está generando y los recursos que salen de allí".

Expertos señalan que en materia de Ciencia, Tecnología e Innovación (CT+I), Colombia, aunque con algunas capacidades construidas y unos resultados obtenidos, no dispone de una base firme, sólida y amplia sobre la cual, en un período de Gobierno, se pueda construir e impulsar una locomotora que le dé a la economía colombiana la posibilidad de hacer del conocimiento una fuente cierta y sólida de crecimiento y desarrollo.

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Que el boom minero energético no se convierta en una pesadilla

El presidente de la Andi, Luis Carlos Villegas, ya lo anunció: este año la inversión en minería romperá todas las marcas.

A septiembre de este año las empresas extranjeras habían invertido 5.740 millones de dólares en este sector, cifra superior a la de 2009 cuando alcanzó los 5.727 millones de dólares. La proyección de la Andi encaja con la afirmación del ministro de Minas y Energía, Carlos Rodado Noriega, quien reveló que el área titulada para actividad minera en el país llega al 4,2 por ciento del territorio colombiano, es decir 4,8 millones de hectáreas.

Sobre el boom minero-energético podría decirse que se sostienen las otras locomotoras, como quiera que las expectativas de financiamiento del Gobierno se apoyan en los hallazgos auríferos y de combustibles. El sector minero, incluyendo petróleo y gas, representa en la actualidad un 8 por ciento del PIB.

El ex ministro Carlos Caballero Argáez señala que no hay inquietud por el aumento en la producción y las exportaciones de minerales y petróleo, sino porque la economía no se diversifique, el desempleo se mantenga alto y la tasa de cambio se aprecie. Ese es el reto.

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El agro será un factor de crecimiento para la población vulnerable

La dinámica del sector agrícola es pobre respecto al crecimiento económico que experimentan otras actividades de la economía. Mientras durante el primer trimestre de 2010 la actividad económica se expandió a un ritmo anual de 4,4 por ciento, la agrícola se contrajo 1,3 por ciento.

Pero, aunque ha perdido participación en los últimos años, el agrícola es ciertamente uno de los sectores más intensivos en la generación de empleo.

Juan Camilo Restrepo, ministro de Agricultura, reconoce que mover esta locomotora no es tarea sencilla, debido al decaímiento que tiene de tiempo atrás.

Rafael Mejía López, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC) destaca que la mayoría de población rural está concentrada en el sector agrario: 3,2 millones de personas, el 18,2 por ciento de la población del país. El hecho de que el Gobierno tenga este sector como uno de los motores de la economía es relevante para Mejía López, quien destaca las amplias oportunidades de desarrollo que presenta la agricultura para Colombia después de la pasada década de crecimientos negativos.

Artículo publicado por el Colombiano, octubre 10 de 2010